Perenco es una empresa petrolera anglo-francesa, propiedad de la multimillonaria familia Perrodo (su fundadora) que opera desde hace años en el territorio de varios pueblos indígenas no contactados al norte de la Amazonía peruana en los lotes 67 y 39.
Organizaciones indígenas llevan más de 20 años presionando para que el territorio, conocido como Napo-Tigre, sea debidamente protegido como una reserva indígena para pueblos indígenas en aislamiento.
Sin embargo, Perenco considera que la creación de la reserva supone una amenaza para sus operaciones y se opone fuertemente: niega la existencia de pueblos indígenas en aislamiento y presentó una demanda judicial contra la creación de la reserva indígena.
Las perforaciones petrolíferas en territorios de pueblos indígenas no contactados son una amenaza a su supervivencia: destruyen y contaminan la selva y conllevan un altísimo riesgo de contacto no deseado que podría diezmarlos por completo.
Perenco ha ignorado las protestas y las cartas de organizaciones indígenas peruanas, grupos de apoyo y de Survival International: parece que solo una fuerte campaña internacional puede persuadirlos para que deje de amenazar la supervivencia de los pueblos indígenas no contactados.
Por favor, envía un email a François Perrodo, presidente de Perenco, instando a que su empresa petrolera abandone el territorio de Napo-Tigre en Perú.